Signo 5-11.
El refrán de Oshe Ojuani dice:
Al que lo velan, no escapa.
En Oshe Ojuani te aconsejan:
Oshún, Orunla, Obbatalá, Elegguá, Oyá, Oggún, Odduduwa, Shangó, Babalú Ayé, Olókun, Ozaín, Ikú.
Entorno actual de Oshe Ojuani:
El amante de su mujer tratará de envenenarlo a usted. Hay traición de sus mayores. Usted se siente en tinieblas, su vida no continúa igual aun cuando le es difícil reconocerlo. Ha sido víctima de reemplazos sociales, sexuales, familiares, económicos y de salud.
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Patakí. Oggún Arere.
Oggún arere abusaba de las mujeres que se introducían en su territorio (nibe) y de un modo violento e iracundo las poseía y luego las maltrataba y más tarde las arrojaba de sus dominios bajo terribles penas. Una doncella llamada Yemayá sara magua incitada por las narraciones que corrían acerca de Oggún arere una vez se introdujo en el monte, con la deliberada intención de que el hombre la pasara al estado de mujer. Yemayá corre la misma suerte que las demás mujeres, sus ansias vencen al dolor y requiere a Oggún con más placer. Oggún arere la desoye y golpeándola de nuevo, la arroja del monte. La muchacha llena de angustia corre a casa de su hermana Oshún y le pide consejo porque se había prendado del brutal Oggún arere y Oshún condolida ante el dolor de su hermana le dice: espera aquí en tu casa esta noche a Oggún arere y tomo un plato de oñi y se amarro 5 pañuelos en la cintura y emprendió la jornada hacia al monte, ya de entrada se encuentra con el bravo hombre.
Oggún arere trata de echarla en sus brazos mas Oshún esquivando su cuerpo, resbala por las ásperas manos del hombre y despojándose de sus 5 pañuelos empieza a danzar mientras derrama el oñi por su cuerpo brillante, ágilmente avanza hacia Oggún arere, que fracasa una y otra vez al querer estrecharla en sus brazos y derrama la miel por su cuerpo desnudo y el hombre ya bajo el sortilegio de la danzarina la sigue decididamente hasta el borde del monte, y allí se tiende Oshún y más tarde se acopla con el brutal Oggún arere y hace ofikale trupon y Oshún le contesta, vamos a mi casa y allí estaremos mas cómodos.
Oggún arere accede y Oshún lo introduce en la casa de Yemayá, como la noche era oscura, lo mete en el lecho de Yemayá y se acuesta ella también y más tarde se desliza y los deja solos. Oggún arere sin sospechar el cambio, encuentra el camino abierto para gozar a la supuesta Oshún, pero en los albores del día, descubre el fraude y golpea furiosamente a Yemayá y abandona la casa precipitadamente y al salir se encuentra con Obbatalá y trata de desahogar su ira con ella.
Obbatalá corre y se arroja al rio, allí titiritando de frio y después de batirse con la corriente sale temblorosa en busca de su manta que la cubra para abrigarse y luego fue a casa de Orunmila, para que este junto con las mujeres sacaran a Oggún del monte.
Nota: Cuidado con dos obini en mismo ile. Maferefun Oshún, Yemayá, Obbatalá, y Orunmila.